En Pastelería Ascaso practican la ‘pastelería honesta’, la que da valor a la riqueza de las materias primas, a su buena selección, cuidando el origen y la pureza de los ingredientes y trabajando de manera artesana y cuidada sin añadir colorantes ni conservantes.
Esta ‘pastelería honesta’, sin artificios, inspirada en la corriente de la ‘gourmandise raisonnée’ francesa, la ‘pastelería razonada’, que permite al consumidor no renunciar al placer de saborear un buen dulce, disfrutando de su esencia.
La apuesta por el origen motiva también la investigación de las recetas tradicionales: en Ascaso buscan la manera de recuperarlas y, si es posible, mejorarlas a través de la innovación. El buen hacer tiene un objetivo: elaborar dulces que sigan sorprendiendo sin renunciar a esos valores.
